Cumplimos un año más con la tradición al reunirnos para celebrar la onomástica del santo de Padua, muy venerado en nuestra ciudad por todos los ceutíes.
Miembros de la Casa, nos desplazamos como es ya costumbre hasta Chiclana de la Frontera, donde en la parcela de un socio, donde se ubica un pinar, quedamos para hacer la paella como es de rigor en ese día y pasar la festividad de San Antonio, recordando las romerías de antaño cuando subíamos hasta el Monte Hacho a celebrar aquel día tan entrañable y de diversión para todos los caballas.
El lugar lo adornamos con un cuadro del santo y el cartel anunciador de la Romería de Ceuta, editado por la Consejería de Festejos, así como una gran bandera que presidió toda la jornada.
Tras la comida, en la sobremesa que algunos la reposaron, otros tuvieron juegos de mesa y los mas tomaron café y un licor. De esta manera paso tarde y dimos por finalizada la reunión a la que asistieron como alguien dijo,- los de siempre y algunos más.
Hay que reseñar que acudió Doña Antonia González, madre de la socia Marisa Claros que celebró su santo con nosotros, a la que se le agasajó con un regalo y con sus 101 años, dijo haber pasado un día muy contenta con tantos caballas. Quiso dejar constancia fotografiándose con la bandera.
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